martes, 6 de enero de 2009

Dragón


Mi recuerdo.
El espejo que incendié un día.
Mil llamaradas poniendo al rojo
los corazones,
bestia negra bailando alrededor de tu risa,
creyéndote.
Sin creerte nada.

Tu Dragón soy la experiencia de la última noche
que parió todos los días de las mañanas sin ti,
de tratar de volar sin encontrarme las alas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

me gusto mucho tu invento, como para imitarte, eres un loco quien lo diria que te inpires tanto con esto, me gustaria bverte inspirado también en el amor, simplemente con el amor, sin peros de nada y sin temores.